Tras las elecciones del 24M se abre un periodo de incertidumbre en España.
La democracia española es harto deficiente (claro que si nos ponemos estrictos, todas lo son). Los poderes legislativo y ejecutivo tienden a ser el mismo, y el judicial se ve muy mediatizado por el ejecutivo. Los “representantes del pueblo” lo son más bien de la cúpula de sus partidos u oligarquías, las cuales, a su…
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